martes, 8 de marzo de 2022

A Mi Querida Amiga

Siempre me cuestiono la manera en que debería de comenzar mis escritos, la manera precisa en que debería de comenzar a relatar lo que quiero aquí plasmar. Aunque ahora tengo muy claro lo que quiero aquí decir, no se como relatar y dejar ir las letras para que sea lo más cuerdo y coherente del mundo. Adicional de ello, que no quiero perderme entre ideas como suelo hacerlo constantemente. 

Empecemos... 

Una muy querida amiga mía se ha acercado de alguna manera y me ha preguntado... ¿Eres feliz? 
Antes de dar la respuesta que estaba en mi mente, lo primero que he preguntado fue ¿Por qué la pregunta? a lo que su respuesta sencillamente fue: "yo he perdido mi felicidad, no se donde la he dejado. Y por ello, me pregunto si mis amigos son felices." Querida amiga, en ese momento solo te dije: "sí, soy feliz. No todo el tiempo, no todo el día, no todos los días, pero si lo soy." Y ahora, quisiera abarcar un poco más mi respuesta y ampliarla un poco más, y con la espera y el sueño de que entre mis palabras quizás puedas encontrar una buena respuesta a lo que realmente es tu pregunta. O a lo que realmente quieres saber más allá de solo cuestionarte. 

Sí, efectivamente soy feliz. No siempre lo soy, hay días donde no puedo con mi propio existir y solo quiero sucumbirme debajo de las sombras y que nada me encuentre, donde la tristeza y la desesperanza me cubren y solo espero llorar y llorar cuanto pueda. Pero, que desafortunadamente mi mente, mi cuerpo y mis emociones me niegan; puesto que empiezo a pensar que mis lagrimas se han secado hace mucho tiempo. Hay días donde la felicidad esta desde el momento en que despierto y abro mi mente a la realidad del mundo, donde no me dejo sucumbir por aquellos dilemas o problemas que nos acuden constantemente. Seguramente no lo seré todo el día, cada hora.
Habrán momentos donde realmente no podré ni con mi propio existir, donde seré rabia profunda y estrés desorientado. Pero, al hacer el hacer el balance de mi día en general sé y estoy seguro que todo el día fui feliz, puesto la rabia y el estrés habrán pasado a un segundo plano por completo. Siempre hay un abrazo, una palabra, un café, un amigo, un beso, una tontería que me harán olvidar de todo. Siempre vendrá aquel arco iris con el que convivo día a día a soltar colores y brillos por doquier a mi oscuridad y hostilidad. Quizás aquel hombre que amo en este preciso momento de mi vida, me dirá una palabra o una frase hermosa que me hará sentir la plenitud perpetua de la felicidad. O incluso, vendrás tú con tus chistes sin gracia a hacerme reír como niño. 
Al final de la semana, aunque no lo haya sido todos los días o todo un día, aunque solo haya sido por momentos pequeños y ligeros instantes. El domingo al ir a dormir y pensar en todo lo que paso durante la semana que se termino, me sentiré feliz. Inmensamente feliz, por el hombre en el que me convertí, por la persona que soy. Por los amigos que tengo, por la amiga que eres conmigo, por mi madre o mi abuela, por las tonterías y pendejadas con las que puedo salir o por lo que sea, habrá pasado a un segundo plano todo lo malo y solo pensaré en la real felicidad que me está acompañando en estos momentos en mi vida.

¿Qué si tus amigos somos felices? Sí, quizás no todos en este preciso momento, tal vez unos más que otros, algunos puede que no lo estén siendo en este momento donde sienten el agobio y el dolor a piel viva ellos. Pero, sabes una cosa? (estoy usando mucho los peros, perdón) Si miramos el pasado, y para no ir lejos, vamos dos años atrás. Para nadie es un secreto el desastre de ser humano que yo era, nadie daba un peso por mi, todos estábamos seguros que en medio de una borrachera algo pasaría o que no podría más de todo el alcohol que consumía. Nadie creía que yo fuese a ser capaz de sostener una relación que durara más de dos meses o que no se basará solo en sexo. hace dos años estaba perdido en un hueco tan profundo que sentía que la felicidad si había terminado para mi. Que ya no habría otra oportunidad para mejorar mi vida o hacer que todo cambiara. Y mira, ahora no soy ni de cerca algo parecido a lo que fui en aquel 2019.

Ahora, ahora tú te cuestionas donde esta tu felicidad. Ahora te preguntas si realmente volverás a ser feliz. Ahora estas nadando en circulo en un vaso de agua  que se ha creado con el paso del camino y de las decisiones tanto propias como de otros. Ahora te cuestionas si realmente volverás a sonreír de nuevo. Hace unos meses no eras capaz de tener emociones o sentimientos para nada. Decías estar muerta por dentro, y ahora... ahora te cuestionas todo, y tienes de nuevo emociones. Sentimientos, te preguntas constantemente todo y estas en harás de buscar tu propia felicidad. 

Y hoy, aquí sentado escribiendo todo esta palabrería que quizás solo sea barata y de cajón. Te puedo asegurar que así como algunos somos felices en estos momentos, puede que en otro momento de nuestras vidas volvamos a recurrir a la oscuridad y tristeza infinita, y así podrán pasar algunos meses. Y de nuevo volverá a sentirse felicidad por alguna razón. Así mismo te puedo asegurar querida mía que aunque en estos momentos sientas que no serás feliz en ningún momento o te cuestiones si lo serás nuevamente. Te lo digo, lo serás. Pero eso no quiere decir que será un sentimiento eterno, además. Sería demasiado extraño una persona eternamente feliz, que pereza. Adicionalmente somos demasiado oscuros como para andar riendo por todo constantemente. Que flojera. 

Todas las emociones son pasajeras, son cuestiones de ir y venir, de estar arriba y de estar abajo. Todo son periodos, hace un tiempo pensaste no volver a sonreír y lo hiciste de nuevo, y ahora te cuestionas de nuevo si sonreirás otra vez. y lo harás, un día te enamorarás, ahora tienes tus alas abiertas y ya nada podrá detenerte, ahora has dejado de pertenecerle al mundo y has empezado a pertenecerte el mundo a ti. 

A mi querida amiga, le puedo decir y le puedo suplicar que no se rinda. Que la batalla quizás sea difícil y muy dura, pero cuando ganemos esta batalla nos retiremos en un café de París por todo lo pasado, pensaremos en el pasado y nos sentiremos alegres de haber vivido todo ello. Querida amiga, te suplico no dejes de lado la felicidad que llegará un día, no te puedo decir que mañana o en una semana. No lo sé, así como un día fuimos tristes y vacíos en un anden de una discoteca, luego reímos de nuevo y caímos y vamos en ese camino. Querida amiga, aquí siempre están los abrazos abiertos y la esperanza de un nuevo mañana. No desistas que la felicidad está en camino, aguanta un poco más y lograremos y lograrás más de lo que nunca nadie pudo imaginar. 

Querida amiga, la felicidad y la tristeza en sus ires y venires nos han de sorprender. Hace unos años vivíamos en el licor, sobre todo yo. Pero, resistimos y sobrevivimos. Hoy soy un poco mayor a ti, y aunque en muchas cosas sea mucho más idiota que otros o que tú. Creeme, lo lograrás. Creo en ti. A mí querida amiga le digo que le amo y le anhelo, le sueño y me vivo. Años y más años aquí, durmiendo como locos, escribiendo con desespero, jugando tontos juegos y soñando siempre. La felicidad nos llevara por completo.

A mi querida amiga. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario